No se las tenía todas consigo Bidaideak cuando llegó al  Pabellón Municipal Pilar Fernández Valderrama de Valladolid a disputar el  encuentro correspondiente a la cuarta jornada de la Liga regular en División de Honor de BSR. Enfrente tenía a un histórico de este deporte, el Fundación Grupo Norte, que sumaba en tabla tantos puntos como él y que, además, había exhibido buen juego y músculo ofensivo de primer orden, tras el fichaje del australiano Brett Stibners, un auténtico especialista en doblegar aros rivales. Y menos aún las tuvieron cuando los de violeta amanecieron en el partido con una salida en tromba que situaba en el minuto 3 el marcador a su favor con un 8 a 2. Sin embargo, los bizkainos fueron ajustando la defensa y en apenas un minuto y medio, con las aportaciones en ataque de Asier, David y O´Neill se dieron vuelta al luminoso. Le sucedieron minutos de toma y daca que impidieron coger distancias a ninguno de los contendientes. Sólo en el último del primer parcial, y gracias a dos canastas consecutivas de David Mouriz,  se estiró un poco en favor de los ayer de blanco, para liquidarlo con un 17 a 22.

El segundo de los parciales lo fue de control del marcador por parte de los bilbaínos que supieron ensanchar diferencias con paciencia y rigor. Se constataba ya que éstos se encontraban más a gusto en cancha,  entre otras cosas porque habían sabido maniatar lo suficiente a Sibners de forma tal que no pudiera deslumbrar con sus lanzamientos. Cierto es que entre los argentinos Ruggieri (21 puntos) y Adrian Pérez (20), los pucelanos evitaban salirse del partido, pero no lo es menos que su aportación fue insuficiente para cuestionar el dominio de una escuadra, la bizkaina, que repartía sus puntos con más heterogeneidad entre sus jugadores en cancha. Al minuto 20 se llegó con un ya cómodo 35 a 46 que si bien no sellaba el partido si dejaba a las claras quien era dueño del mismo.

Tras la reanudación, literalmente, Bidaideak desarboló a los castellanos. Baste, tal vez, decir que al minuto 26 se llegaba con un diferencial de 23 puntos a su favor (38 a 61). Todo parecía sentenciado para entonces y la hinchada bilbaína, que había acudido en buen número a apoyar a su equipo, daba por descontado que haría de la mejor de las maneras su viaje de vuelta al botxo. Pero esto es baloncesto, y no se sabe bien si el hombre del mazo cambió de deporte y decidió golpear a los de Esteban Nuñez o si fue sólo una concatenación de errores en marcas y lanzamientos conjugada con aciertos locales, pero, la verdad, es que en poco más de 3 minutos, los pucelanos asestaron un 14 a 0 que les hizo entrar en el marcador (52-61) y, con ello, en el partido.

La bocina de inicio del último cuarto sirvió para despertar a los bilbaínos que fueron los primeros en marcar y declarar así cerrada la mala racha. Los pucelanos perdieron hombres importantes por quintas faltas, pero aun así siguieron plantando cara. Puntualmente llegaron a apretar el luminoso hasta situarlo en un 50 – 55 en el minuto 34 y en un 66 -72 en el 37, pero la experiencia del equipo liderado por Asier García se hizo valer, impidiendo que las diferencias se acortaran más, resolviendo el encuentro con un 66 a 77 final que explica, tal vez, la diferencias de prestaciones de los dos equipos en cancha, pero que, en absoluto, permiten vislumbrar el relato del mismo, que tuvo mucha más emoción e incertidumbre que la comodidad que hace intuir los guarismos.

Echando un ojo a las estadísticas, éstas señalan que, por Bidaideak, todos los jugadores que saltaron a la cancha durante el encuentro sumaron puntos:  Asier, 21, O´Neill, 19, Luis Jasso, 13, David Mouriz, 11, Manu Lorenzo, 7,  Blair, 4 y Txema Avendaño, 2.

Los rebotes de los bizkainos tuvieron la firma de Asier, 15, Manu, 7, Jasso, 4 y O Neill, 4, y Txema, 1. El rey de las asistencias volvió a ser, un partido más, Asier, que tramitó hasta 9.

Con los puntos en juego en su zurrón, los bilbaínos se sitúan terceros en tabla, ya en solitario, a la espera de lo que pueda ocurrir el próximo sábado en Txurdinaga en el encuentro que les medirá con el actual campeón de Liga y Copa, el Ilunion madrileño que no conoce la derrota en este campeonato.