Decíamos en la previa que es en los partidos contra los grandes donde demuestra un equipo que lo es. Ilunion es el más grande entre todos ellos. 16 campeonatos de Liga, 6 conseguidos en las últimas 7 temporadas, permiten así calificarlo. Bidaideak ya sabía que era ganarle porque el año pasado consiguió hacerlo en Bilbao (fase regular de la Liga) y en Avila (Final4). Pero nunca había logrado vencerle en Madrid. En los últimos años había estado a punto en algunas contiendas, pero siempre el arreón final de los de la ONCE les habían dejado con la miel en los labios. Pero esta vez pudieron degustar el sabor de la victoria en el feudo de los supercampeones. Contrariamente a lo que había ocurrido en otras contiendas, no fue en la primera de las partes del encuentro donde los vascos dominaron, sino que fue a partir de entonces cuando se impusieron a los madrileños. Con locuacidad y sin ambages. Con una contundente diferencia en juego y marcador que no deja lugar a dudas quien mereció llevarse los puntos.

Bidaideak fue, sin discusión, el que más puso en el parqué para hacerlo. Aún con un equipo mermado en efectivos, dominó, sin embargo, en todos los conceptos que hacen posible las victorias. Entereza física, rigor táctico, capacidad de intimidación, dominio de los tableros y acierto en el tiro, llevaron la firma del equipo bizkaino. Cierto es que hasta el descanso ambos equipos mantuvieron equilibrado el marcador -llegaron con un 30 a 31 favorable a éste-, pero ya para entonces se veía que el motor de los de negro trabajaba a más revoluciones y que los locales apenas tocaban embrague e iban siempre con la marcha más larga. De hecho, sólo se sostenían por los destellos de la enorme calidad que, de vez en cuando, emitían y por el acierto en canasta del australiano Lathan y del británico Bywater.

Pero tras los minutos de descanso, Bidaideak salió con una defensa aún mas presionante y el inglés fue totalmente eclipsado, quedando todo el activo amarillo en manos de Alejandro Zarzuela y del australiano. Demasiado poco argumento para intentar dejar en Madrid los puntos. Baste, tal vez decir, que el máximo encestador de los de la ONCE no logró un solo punto desde la reanudación, y que 10 de sus 11 lanzamientos de triple y 18 de los 22 que tiró de dos puntos, no encontraron diana.

Por el contrario, los bilbaínos, fueron capaces de mantener un ritmo alto en su juego y con una defensa atosigante sobre las mejores manos rivales que impedían toda opción cómoda de lanzamiento, fueron inclinando a su favor el marcador. Los continuos cambios en el parqué ordenados por Esteban Núñez abrían, continuamente, variaciones posibles en su juego de defensa y ataque, lo que acabó por desarbolar a los supercampeones. En el parón tras finalizar el tercero de los tiempos ya parecía que el partido llevaba las trazas de terminar a su favor (42-49) y los últimos 10 minutos, de prodigiosa concentración y dominio de la situación, hizo que definitivamente el luminoso marcara tan holgada diferencia.

Bidaideak pasó una reválida que tenía pendiente en su historia. Y lo hizo con un equipo, que aún incompleto en cuanto a efectivos, fue capaz de demostrar la rotundidad de su carácter. Todos y cada uno de los que rodaron sus sillas por el parqué del Polideportivo del Canal, supieron lucir sus mejores armas. Asier volvió a firmar una triple corona (12 puntos, 20 rebotes, 13 asistencias), Turek acreditó, de nuevo, ser uno de los  mejores tiradores de la Liga (24 puntos), Manu Lorenzo fue capaz incluso de intimidar a las torres madrileñas, sobresaliendo tambien en los lanzamientos cerca del aro (10 puntos), Luis Jasso barrió todo lo que pudo y más en su pintura y fue letal en sus acercamientos a la contraria (13 puntos), Txema Avendaño supo poner intensidad en los minutos que disfrutó en cancha (3 puntos), David Mouriz se aplicó como nadie en impedir las transiciones rivales (2 puntos), Jannik Blair, volvió a demostrar que no hay punto 1 como él en la Liga estatal (4 puntos) y Xabier Iragorri, aunque no sumó para el tanteador final, volvió a dar oxígeno al equipo en los momentos en el que éste más o necesitaba.

Los bilbaínos consolidan su tercera posición en un campeonato que encabeza el MIDEBA Extremadura, seguido del AMIAB Albacete. Es precisamente contra este último, a la sazón actual campeón de Liga, contra el que se medirá Bidaideak el próximo sábado en otro, sin duda, apasionante encuentro.